¿De qué se encarga y cómo puede ayudarte un abogado en Derecho Penal?

Probablemente quien no esté inmerso en el mundo de la abogacía, o nunca haya tenido que acudir a un abogado en su vida, no sepa diferenciar en detalle cuáles son los límites entre aquellos que se dedican al Derecho Penal y al Derecho Civil, límites que intentamos abordar a continuación.

En líneas generales, la figura del abogado en Derecho Penal es una de las más relevantes por las consecuencias que tienen los casos a los que se enfrentan, ya que disciplina la potestad punitiva (ius puniendi), es decir, regula la actividad criminal dentro de un Estado.

Dicho de otro modo, un abogado penalista se encarga de trabajar en base al conjunto de normas jurídicas por medio de las cuales el Estado define las conductas u omisiones que constituyen delitos, así como las penas y/o medidas para sancionar a quienes incurren en la comisión de esos delitos.

 

Entonces, ¿en qué casos participa un abogado penalista?

Discernir en qué circunstancias corresponde actuar a los abogados penalistas es fundamental para saber cuándo se puede y se debe llamarles para ponerte en sus manos como profesionales formados, no sólo por sus conocimientos, sino además por la experiencia en la materia, siendo expertos en litigios como los siguientes:

Delitos contra las personas y la vida

Los comportamientos más graves en los que hace falta la representación de un abogado penalista son esos en los que se atenta contra la vida, como asesinatos, torturas, trata de personas, abusos, etc.

Delitos contra la libertad

En segunda instancia aparecen los delitos contra la libertad, si se producen secuestros, amenazas, coacciones, detenciones ilegales, y otros actos que atenten contra la libertad de movimiento o pensamiento de las víctimas.

Delitos contra la propiedad privada

Desde un robo hasta un incendio intencional, todas las acciones que se producen contra la propiedad privada de alguien, requerirán de la intervención de un abogado penalista.

Delitos de conducta

Como está claro, la convivencia en sociedad supone el cumplimiento de un conjunto de normas. Siempre que se dé cuenta de faltas a esas normas, como el tráfico de drogas ilegales, la conducción de vehículos bajo sus efectos, etc., deberá contratar a un abogado penalista.

Delitos patrimoniales

Los delitos patrimoniales deben incluirse asimismo entre el ámbito de actuación de estos letrados. Hablamos de delitos como la malversación de fondos o la falsificación de documentos, aunque podríamos citar la mayoría de las estafas que tienen que ver con la apropiación ilícita de dinero. 

Alguien estafado, sin ir más lejos, deberá buscar un abogado en Derecho Penal que articule la acusación; igualmente sucederá con el estafador, quien requerirá representación legal para defenderse de los hechos señalados.  

Delitos contra el honor

A veces olvidados, los abogados penalistas se especializan también en los delitos contra el honor. Calumnias e injurias son dos de las muestras más conocidas en las que se contrata su asesoramiento.

 

Recapitulando, podemos decir que el Derecho Penal es el conjunto de normas que se encarga de establecer penas o medidas de seguridad a conductas de las personas físicas o jurídicas que lesionen derechos de los demás. Se basa en seis principios fundamentales: Principio de legalidad, Presunción de inocencia, Principio de igualdad, Principio de irretroactividad, Non bis in idem y por último, Principio de proporcionalidad, los cuales prometemos desgranar muy pronto en otra entrada.